domingo, 3 de marzo de 2013

Carta a tú



Querido tú,

Me da pena que seas un cagado y que nunca madures y que tal vez jamás encuentres tu lugar en el mundo. Me da pena, especialmente, que yo tenga que vivir cagada por tu existencia hasta que logres madurar y lo peor es que, si nunca lo haces, tendré que sacarte de mi vida para que no me cagues más.

Ya estamos grandes, ambos; pero parece que el tiempo pasa y todo sigue igual. Yo sigo esforzándome como puedo dentro de mi flojera y tú sigues viviendo tranquilo sin esforzarte para nada. Nunca entendí si la gente era demasiado permisiva contigo o si realmente nunca te importó lo que te dijeran los demás. Recuerdo que la gente sí te decía cosas. No sé si siempre, pero te gritaban y te pedían que te corrijas; así que supongo que sencillamente nunca te importó. A pesar de todo, creo que hasta yo dejé que pases sobre mí muchas veces y, a pesar que le dije a mi mamá, la culpa siempre fue mía porque sabía que eras un cagado e igual permití que suceda.

Me da pena que seas un cagado, en verdad. Me da pena que vivas así, renegado a una esquina sin tomar responsabilidades por tus actos y dejando que te lleve la corriente. Me da pena porque sé que así no se consigue nada importante en la vida. Tal vez, en realidad, nunca quisiste conseguir nada importante en la vida por lo que sería tonto sentir pena porque nunca lo harás; pero de cierta manera me hubiera gustado que seas alguien importante o que hagas algo importante. De repente solo soy egoísta en este sentido, pero creo que a todos nos gustaría ser importantes de cierta manera, ¿no?

La vida me ha enseñado que jamás debo acostumbrarme o aguantar cosas que no me agradan, aunque de repente es solo mi creencia de joven revolucionaria. Lo aprendí cuando esos bullies me hacían la vida imposible en el colegio y jamás dejé que sus comentarios me hirieran o que se queden sin saber lo que pensaba de ellos. De repente faltaron bullies en tu vida para que entiendas que no debes tratar así a la gente, que no debes pasar por encima de ellos y querer que el mundo se acomode a tus necesidades e intereses. Suena horrible, lo sé, pero a veces creo que el ser un "underdog" y estar del lado de la persona a la que bullean te hace darte cuenta que nadie tiene por qué sentirse así y que no es justo. De cierta manera le agradezco a mis bullies por permitirme tener esta visión y me gustaría que tú la tuvieras, también. De repente así dejarías de pasar por encima de los demás y obligarlos a acomodarse a tus necesidades.

Te escribo así, a lo grande, porque eres muchas personas. Eres tantas personas en mi vida que me cuesta escribir sin relacionar mi texto con alguna en específico. Me da pena que haya tanta gente como tú en mi vida y en el mundo. Me da pena sentirme así por tantas personas, también. Hay algo que está muy mal en el mundo, o en mi mundo.

Al final, realmente espero que madures y encuentres tu lugar en el mundo y dejes de pensar que tienes derechos por sobre las demás personas. En especial, espero que tomes responsabilidad por tus actos y te des cuenta que haces cosas que están mal y te disculpes de corazón por ellas; aunque siempre pensé que eso era madurar. Estoy preocupada que nunca lo hagas y te tenga que sacar por siempre de mi vida y seas una de esas personas que no querría que se acerque a mis hijos o que perturbe mi paz cada vez que te vea. Por favor, madura para que podamos seguir viéndonos y seguir en contacto y que, tal vez, algún día puedas conocer a mis hijos. 

Por favor, madura y deja de ser un cagado porque por ahora no te puedo sacar de mi vida y no aguanto más de esto.


Si lloro, es de rabia.
La foto es cualquier cosa que me gustó, es de aquí.

2 comentarios:

paul martin dijo...

siempre me complace leer. algo tuyo lele . besosss siguee asi

Unknown dijo...

"tú" siempre tendrá problemas