viernes, 31 de diciembre de 2010

Nuevo Año, viejo año


Hoy termina el 2010. Gracias, 2010, has sido bueno conmigo. En verdad empezó complicado, empezó con muchos miedos y muchas inseguridades. Empezó con desiluciones, separaciones y pena. Luego todo cambió y siguió cambiando y ahora estoy agradecida por este año tan bueno.

Salí bien en mi primer año de universidad. Salí invicta y con notas promedio. Tenía tanto miedo de todo, miedo de cagarla y jalar todos mis cursos, pero todo salió bien. Por supuesto, tuve que lucharla, no vino fácil. En el primer ciclo me moría de miedo y calculaba mi promedio de Matemáticas cada vez que tomaba una práctica (que era cada semana). Me tuve que desvelar más de una noche haciendo las monografías de Sociales y Computación. Pasé por la frustración más grande con mi grupo de Sociales. En el segundo ciclo por alguna razón me sentía agotada permanentemente. Matemáticas no me resultó fácil, tampoco, pero mi mayor problema fue Química Orgánica. Me tuve que romper la cabeza estudiando para los dos últimos exámenes para poder pasar y al final lo hice bien. En realidad no ha sido fácil, no creo que ningún ciclo vaya a ser fácil, pero logré tener un primer año invicto y me alegro mucho por eso.

Conocí muchas personas que se han vuelto muy especiales para mí. Por supuesto, también me alejé de otras personas, pero eso no me entristece porque comprendo que así es como debe funcionar. Mis amigos de la universidad son increíbles, son lo mejor que he podido encontrar. Nos balanceamos, nos cuidamos, nos entretenemos entre todos. Ellos son un grupo de gente buenísima onda y en verdad he ganado tanto de ellos. Ahora tengo mejores amigos que me acompañan cada día y que nos complementamos y nos entendemos mejor que nadie. Además, conocí a todos los chicos de Un Techo Para mi País tanto en la construcción de Semana Santa como en la colecta, la construcción de diciembre y en general durante todo el año. Son gente de todo tipo, vienen de todos lados y es enriquecedor conocerlos a todos. Hay gente que siempre te va a levantar el ánimo como hay algunos a los que les tengo que levantar el ánimo siempre. Es genial conocer a tal variedad de gente y todos son tan divertidos y ocurrentes. Sin embargo, hay una persona entre ellos que resalta y que estoy más que feliz de haber conocido durante la colecta y ese es Dante. No hay palabras para expresar lo mucho que me alegró el año el haberlo conocido y que ahora sea mi enamorado lindo. Es el mejor del mundo, me acompaña en todo y me ayuda en todo y por el jamás me siento sola o abandonada, siempre estoy encantada de estar viva. Así que gracias 2010 por traer a todas estas personas maravillosas en mi vida, pero muy en especial a Dante Bengoa.

En realidad siento que este año ha sido un massive improvement en general con respecto a los otros años. Nunca me he sentido más segura ni más contenta con lo que he llegado a ser. No sé si es porque ha sido un desarrollo progresivo durante años o porque todas las cosas buenas que han ocurrido este año me han llevado a sentirme así, pero de todas formas tengo el sentimiento de que jamás me he sentido mejor. Puede ser porque he dejado de pelearme cara a cara contra el sistema sino que me he quedado en un "agree to disagree" o porque he encontrado a personas que me quieren y me aceptan tal cual soy, con mis rarezas y complicaciones. Puede ser porque he adquirido gustos más "modestos", más sencillos y que por lo tanto me dan tanta más tranquilidad. Puede ser porque desde el principio del año hasta ahora he encontrado una estabilidad que no había encontrado en ningún año anterior desde mis 11 años, y eso que no recuerdo muy bien los años anteriores a ese. Hay tantas cosas que han influido en que este año sea tan bueno para mí, tantas que puedo mencionar y tantas que estas ahí pero no las veo.

Hay gente que se despide de este año aliviada de que termine, pero ese no es mi caso. Yo me despido de él tranquila porque sé que he ganado mucho de él y que si sigo esforzándome lograré que el 2011 sea igual de bueno. Quiero agradecerle a todos los que pasaron por mi vida durante este año sin importar si nos hayamos llevado bien o mal porque es gracias a todos en conjunto que este año fue tan increíble. ¡Ojalá todos la pasen bien esta noche y que tengan un 2011 genial!

La imagen es sacada de aquí y es de este artista.

sábado, 25 de diciembre de 2010

Navidad



Hoy es 25, es navidad. Probablemente para cuando termine de escribir ya será 26 y habrá sido navidad. Hoy ha sido navidad y ayer fue noche buena y no me resultó nada especial. No me gusta la navidad.

Es que la navidad es tan alejada de mí en ciertos aspectos y la repudio por otros. No la entiendo y parece que jamás la entenderé. Verán, en mi casa no celebramos navidad. No, no somos judíos ni musulmanes ni budistas. En realidad somos una católica no practicante, una agnóstica y un... hermano mío. Sí, somos tres personas. Recuerdo vagamente que alguna vez celebramos la navidad, aunque también pudo ser un sueño. Recuerdo que me llevaron a la casa de mi tío, que estábamos juntos mis primos, mi hermano y yo, y que mi papá me recogió de la casa de mi tío como a la 1 am. Eso debe haber sido hace mucho, mucho, mucho tiempo... O lo soñé, por supuesto.

La próxima navidad según los estándares normales, o lo que yo creo que los demás creen que es normal, pasó hace algunos años. Nunca había visto tanta gente en una casa tan pequeña. Me parece pertinente resaltar que, desde que tengo memoria para recordar navidades, he pasado todas las navidades en la casa de playa con mi mamá, mi hermano, mi tío, mi tía y, ocasionalmente, mi abuela. La última gran navidad tenía muchas más personas que eso. Además de los de siempre estaban mis primas, una con su esposo y sus dos hijos y la otra solo con su hijo. También estaba mi otro tío con su hijo y, ¿me parece recordar que también estaba mi tía Ana? Era demasiada gente en esa casa tan pequeña y como habían niños esa vez sí hubo árbol y regalos para ellos, aunque la comida fue poco convencional, como siempre. No sé si sus navidades son así usualmente, pero las mías no.

En mi casa no hay árbol de navidad, no hay regalos, no hay pavo con puré de manzana, no hay familia extendida, no hay panetón, no hay chocolate caliente ni adornos de Papá Noel ni ninguna de las cosas que conforman la navidad en otras casas. En mi casa la navidad es una fecha en la que nos juntamos cinco gatos a comer algo que no solemos comer normalmente. Los dos últimos años comimos chupe de camarones, el año pasado vino acompañado por tequeños de pulpa de cangrejo. Buenaso. También recuerdo que un año comimos lechón al horno hecho con una receta china o algo así. Recuerdo que alguna vez prepararon pavo, a pedido mío, pero todos decidieron que era demasiado aburrido y me echaron la culpa de una mala cena navideña. Normalmente cenamos entre las siete y las nueve de la noche, porque cenar más tarde es malo para la digestión. Después de cenar nos envolvemos en conversaciones triviales o se va cada uno por su lado a ver cómo pasa el resto de la velada. Por lo general recuerdo sentarme a leer o jugar solitario hasta que sea de madrugada para dormir.

En realidad, all in all, supongo que se podría decir que en mi casa no se celebra la navidad. Supongo que la navidad lleva una serie de pautas comunes en la mayoría de los hogares que la hacen la festividad que es. Debe ser por eso que no me gusta, porque nunca la he celebrado con propiedad y no saco de ella la dicha que sacan los demás. Debo admitir que es casi irritante el oír a todos hablando on and on sobre lo rica que es su cena de navidad, sobre lo genial que es ver a todos sus primos reunidos, sobre los regalos que ya saben que les compraron, sobre el chocolate caliente que mata de calor en verano y el panetón que no me gusta... ¿Por qué no puede ser una fecha no-familiar que pueda celebrar yo también libremente? Y lo peor es que si mi enamorado me invita a celebrar navidad con él mi mamá se escandaliza porque "¿cómo vas a celebrar navidad con una familia que no es la tuya?". Claro, that makes sense.

Otra cosa que me revienta de la navidad: lo comercial que es y su hipocresía. Es el más comercial de los feriados, nos la meten hasta por las orejas (qué feo sonó eso). No ha pasado ni Halloween y los árboles ya tienen lucesitas de navidad. ¡Y qué decir sobre los copos de nieve! ¿Acaso es necesario resaltarles que acá en Lima no tenemos nieve por lo que no tenemos copos de nieve ni tenemos hombres de nieve? Y si Papá Noel viniera vestido como se viste en todas las imágenes se moriría de calor y que es ridículo que tomemos chocolate caliente en verano. Nos venden una fiesta importada que copiamos directamente de países del "norte desarrollado" y que no tienen ningún sentido dentro de nuestro contexto. Y nosotros compramos e interiorizamos esta fiesta porque somos demasiado acomplejados como para adaptarla a nuestras costumbres que consideramos inferiores bajo la gran sombra de Estados Unidos, la gran potencia mundial, y los países europeos... ¡Dónde sí hay nieve! Uf, ya, tranquilidad. El punto es que, ¿acaso son verdaderamente necesarios todos esos adornos navideños y todas esas luces con formas de renos y Papá Noel? Si supuestamente es una fiesta para honrar el nacimiento de Cristo, ¿no estamos cayendo en excesos y dejando de lado la humildad tan importante para la religión católica? Hay que admitirlo, la única razón por la cual se celebra la navidad en estos días es para arreglar tu casa mejor que la del vecino, para comprar regalos y sentirte todo un pan de Dios y para seguir las pautas de la sociedad y la economía que dictan que es tiempo de navidad y es tiempo de gastar dinero. Tantas veces me han mirado con extrañeza por no celebrar la navidad porque en sus cerebros la idea de la navidad esta tan pegada que alguien que no celebra la navidad no debe ser normal cuando, según yo, lo lógico sería que si no crees en Cristo no tienes por qué celebrar su nacimiento. Bueno, back to basics, el punto es que la navidad es comercial. Y, ¿por qué me parece hipócrita? Aparte por todo lo de la religión, los excesos, la humildad, etc.; porque gente que no se interesa en lo más mínimo por tu bienestar durante todo el resto del año se siente obligada a saludarte y desearte una "feliz navidad" cuando en realidad no les interesa para nada si la pasas bien o mal. Es una cuestión de convención y todos lo hacen, pero preferiría que no lo hagan si no les interesa en realidad. Es como los walls de feliz cumpleaños en Facebook. Falsos.

Soy un verdadero Grinch, me irrita la idea de la navidad. No tengo problemas con los regalos, pero agradecería mucho si me los regalaran dispersos durante todo el año y no durante la navidad porque se sienten obligados a hacerlo. Tampoco es como si me dieran regalos pero... En todo caso, espero que mis lectores no me odien por ser tan amargada y tan party pooper. Comprendo que a mucha gente le agrada la navidad y no los cuestiono ni quiero moldear sus mentes para que empiecen a odiarla. Esta es solo mi humilde opinión y espero que la tomen como tal. De todas maneras me disculpo si llegué a herir suceptibilidades, aunque no entiendo muy bien por qué habría de herir cualquier cosa con esta entrada. Dejando todo de lado, igual espero que hayan pasado una feliz navidad y que tengan un próspero año nuevo. Sé que ese es un saludo por convención y una frase cliché pero quiero que sepan que lo digo en verdad, se lo merecen por haber leído este post completo.

La imagen fue sacada de aquí y es de este artista.

miércoles, 1 de diciembre de 2010

Ciclo



Estaba hablando con un amigo sobre la vida, sobre las relaciones, sobre los comienzos y los finales. A falta de mejor simil, comparé la vida al ciclo celular. Sí, soy de ciencias.

El ciclo celular tiene las fases G1, S y G2; que conforman la interfase. También tiene la profase, metafase, anafase y telofase, que conforman lo que es el proceso de mitosis. La mitosis es un proceso grande, importante para la reparación y para el crecimiento de los seres multicelulares. La interfase es el periodo de crecimiento de la célula y, además, la fase G1 es la fase de preparación para la fase S y la fase G2 termina de preparar a la célula para entrar en mitosis. En general se puede decir que durante la interfase la célula crece y se prepara para entrar a la mitosis y durante la mitosis, la célula se divide para formar dos células hijas. "¿Qué tiene que ver esto con la vida, las relaciones, los comienzos y los finales?", se preguntarán.

Digamos que la mitosis es una etapa grande de la vida, una etapa muy importante que está decidida a marcar a una persona para siempre. Lo que pasa es que en la vida es necesario tener tiempo de reflexión, tener tiempo para poner las cosas en perspectiva. Es necesario contar con tiempo para analizar la última mitosis que ocurrió, ver qué salió bien y qué salió mal. Así puedes hacer un inventario de lo que ganaste, de lo que perdiste, de lo que te has dado cuenta que ya no te servirá más. Esto es sumamente importante porque si no tienes una interfase entre cada mitosis, no te puedes preparar adecuadamente para la próxima. Si te apresuras demasiado y corres hacia la próxima mitosis, no estarás preparado para llevarla a cabo bien porque no tendrás claro lo que tienes para dar. Al final lo único que conseguirás es formar células hijas débiles y defectuosas porque no creciste ni aprendiste lo suficiente para generar una mitosis exitosa. Es así, no podemos apresurarnos demasiado para comenzar una etapa importante tras finalizar otra porque entonces no nos hemos dado tiempo de apreciar la etapa que acaba de terminar. Si no tienes tiempo de poner las cosas en perspectiva no te darás cuenta cuáles fueron tus errores, por lo que podrás volverlos a cometer cada vez. Tampoco podrás darte cuenta de cuáles fueron los errores de los demás, por lo que te podrían volver a herir por eso. Es necesario tener una interfase en la cual crecer y prepararse para así tener en claro qué es lo que se tiene para dar y así no sobreesforzarse por intentar dar algo que no puedes.

Cuando le mencioné esto a mi amigo me dijo: "Eso tiene algo de sentido... Bastante". Yo no sé cuánto sentido tenga o qué tanto me he dejado entender. El punto es que así es como yo veo las cosas, no puedes intentar hacer cosas grandes todo el tiempo porque después pierden su significado y no les das la importancia que merecen. Es mejor tener siempre un intermedio en el cual reflexionar para poder apreciar bien la etapa que acaba de pasar y prepararse para la próxima etapa importante. Por supuesto, puedes quedarte en G0 por siempre, creciendo pero quedándote siempre en el mismo sitio, sin mayores cambios... Pero, ¿en verdad esa es una manera de vivir? Una amiga me dijo una vez: "A ship in harbor is safe, but that's not why ships are built for". Es su quote favorita y me parece que tiene razón. No todos vamos a hacer grandes cosas, las grandes cosas son sólo para algunos, aquellos que pasan a la historia. Mi abuelo no pasó a la historia, lo cual no significa que no haya sido importante, todos somos importantes, pero él no hizo nada grande. Es la verdad, todos podemos hacer cosas grandes, pero no todos las hacemos. Aun así, somos humanos, estamos hechos para vivir. Dentro de tu vida ocurrirán cosas importantes, que no necesariamente serán importantes para el mundo entero, pero sí lo serán para ti. Sin embargo, estas cosas importantes solo ocurrirán si permites que ocurran. Nada pasa porque sí, algo debe condicionarlo y si te quedas sentado en un lugar seguro nunca nada pasará. En la vida hay sufrimiento como hay felicidad y llanto como hay risas pero si te cierras del dolor también te perderás de todo lo demás que puede ser maravilloso y te puede hacer feliz.

Me he distraído mucho al escribir esto, además que lo hice por partes, y perdí el hilo del tema así que acá termina la entrada.

La imagen fue sacada de aquí y es de este artista.