lunes, 1 de noviembre de 2010

Sobre errores y desgracias


Es en días como éste, días grises que se sienten como domingos y que huelen a soledad, que me pongo a escrutinar mis muchos defectos. En días que tengo que estudiar química orgánica, que tengo que repasar matemáticas II, que me veo obligada a contemplar el hecho que tendré que quedarme estudiando durante el verano mientras todos se van de viaje y/o se broncean. En días cómo hoy, feriado, primero de noviembre (en dos minutos ya no lo será).

Para empezar, está mi torpeza. ¡Oh, mi increíble torpeza! ¿Quién más se tropieza con sus propios hermosos lentes morados y los rompe? ¿Quién más se tropieza con las líneas de la acera al caminar a pesar que estas sean de apenas unos milímetros de altura (o hendidura)? ¿Quién más se golpea con las perillas de las puertas cada vez que intenta entrar a un cuarto y tiene moretones en los muslos por eso? ¿Quién más carga cientos de cicatrices marcadas en la piel resultado de accidentes casi vergonzosos? Pues sí, soy torpe, muy torpe. Soy tan torpe que mi mamá me llama "clumsy". Soy tan torpe que todos saben que soy torpe y que una vez lo escribí en un essay sobre mí en sexto de primaria. Creo que la profesora pensó que tenía el auto estima en el suelo porque me llamó y me preguntó por qué pensaba eso y me dijo que yo no era torpe, que era una chica muy inteligente. La verdad es que así como me gusta el morado y tengo astigmatismo, soy torpe. Es una de esas muchas cosas que conforman lo que soy y con las que he aprendido a vivir. No sé, me he acostumbrado a coger las cosas siempre con las dos manos (que malpensable fue eso), a mirar al suelo cuando camino, a no correr por la sala para no golpearme con la mesa de vidrio, a tener cuidado al pasar por la puerta para no golpearme con la perilla. Es sólo uno de los otros rasgos de mi.

Otra desgracia: mi mala suerte. No gano ni un sólo juego de yankenpó, tampoco las battles de Pirates Ahoy (a menos que ya tengan una "táctica" deducible). Cuando necesito tomar un micro urgentemente nunca pasan o pasan tan llenos que la única forma de entrar sería que me suba al techo. Una vez tuve que esperar una hora y media por un micro y al final simplemente me regresé a mi casa. En los exámenes objetivos de matemáticas con puntos en contra siempre me pasa que las que marco pensando que están bien, siempre están mal y las que no marco porque no estoy segura de si están bien, son en realidad las que estaban bien. ¡No le atino a una! Tengo amigos que me dicen: "Es muchísimo más fácil porque con un poco de champa la haces", pero no, yo no tengo champa. La champa no existe para mi. Al contrario para mi existe la... no-champa... Mi mala suerte es tan mala que la primera vez que salí con quien ahora es mi enamorado, él chocó el carro y me pegué el susto de mi vida. Mi mala suerte es tan mala que la única vez que me intentaron enseñar a manejar apreté el acelerador en vez del freno y me traumé de por vida. ¡Ni siquiera pude adivinar esa! Nunca he ganado un premio, una rifa, ¡nada! Fui en movilidad mis 12 años en el colegio. La movilidad hacía una clase de rifa todos los meses. Multipliquemos, 12 años, 8 meses de colegio, 3 premios por rifa... ¡288 rifas! ¡Y no gané ni una!

Ahora, no todo es malo, de hecho que puedo recordar momentos en los que he tenido buena suerte. Cuando era más chiquita y mi mamá nos hacía lavar los platos a mí y a mi hermano, a veces pasaban días en los que no se lavaba porque la empleada lavó el jueves y el viernes nos fuimos a la casa de mi papá o no sé qué y por lo tanto la rutina se rompía y no sabíamos a quién  le tocaba lavar. En esos momentos mi mamá nos decía que nos la jugáramos con un yankenpó o con papelitos. Yo siempre escogía papelitos y por alguna razón la suerte me sonreía y siempre ganaba, por lo que mi hermano tenía que lavar (aunque al día siguiente igual iba a tener que lavar yo, pero el triunfo es lo que cuenta). Además de esos pequeños episodios de mi infancia, no creo haber tenido mucha suerte más. Aunque puedo decir que he tenido mucha suerte de encontrar personas tan maravillosas como las que he encontrado a lo largo de mi vida. Mi enamorado, mis amigos, parte de mi familia, la mayoría de mis compañeros del colegio y la universidad... Son todos maravillosos y ha sido una gran, gran suerte el tenerlos a mi lado.

Listo, entrada nueva. Para quitarnos el mal sabor de la ausencia y de la entrada anterior. Para quitarnos el mal sabor de la química orgánica y de las integrales parciales. Para quitarnos el mal sabor de haber tenido un fin de semana largo pero haber dormido apenas un promedio de 5 horas al día (en vez de las 9 o 12 reglamentarias). Para quitarnos el mal sabor de que es la 1 am, que dormiré 7 horas y que mañana tengo el cuatro parcial de matemáticas que lo más probable es que sea objetivo... Recordarlo ha provocado que el mal sabor vuelva.

La imagen fue sacada de aquí y es de este artista.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

no se quien eres pero me caes bien en verdad una vez escribi esto tal vez no te interese tal vez quien sabe:


"pideme no pensar y pensare el doble
el simple acto de que me pidas que no lo haga me hace pensar que tu piensas tanto como yo en..... realidad todos pensamos mucho solo que no todos se dan cuenta de quien piensa y quien no, pues todos pensamos en cosas diferentes..... yo pienso en porque estoy aca
tu en que ropa te pondras pero tu y yo nos podemos romper la cabeza con diferentes cosas.... los dos igual sufrimos asi que ,querido(a) no me pidas no pensar pues ahi esta tu error.... si no puedes con el enemigo unetele....."

Anónimo dijo...

JAJAJAJAJAJA! "El choque", no fue cuestión de mala suerte! :)Ya sabes que fue lo que pasó. Resulta que no quería mirar hacia adelante, sino que quería pasarme todo el camino mirando a la persona del asiento de mi derecha :) ♥.
De suerte y otras cuestiones, hay muchas clases de suertes creo, no todos tienen la suerte de ganarse la tinka, pero algunos sí tienen la suerte de ganarse el premio de una movilidad y no todos tienen una suerte como la mía de encontrar una enamorada tan lindaaaa!!! no sabes lo linda que es!!! :)
Te amo! ♥ :)

Dante

Rafs dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Rafs dijo...

Pfff, pastrula! xD
tu tambien dante =P

Rafael "Phillip"

Anónimo dijo...

que excelente lo de la no-champa. tu entrada me ha hecho reir. no creo que tengas tan mala suerte, de hecho la mente e spoderosa aunque suena a filosofia de vida barata del siglo presente, si piensas que tienes mala suerte y puede que tengas puedes estar llamandola si sigues pensando lo mismo. a lo que me refiero es que te invito cordialmente, sin presuncion de que aceptes, a meterle ganas a la suerte a llamar mentalmente a la "champez". no pierdes nada intentando. suena recontra pavo lo se, pero prueba algo nuevo quizas en una de esas funcione. la suerte funciona para todos aunque no siempre. y bueno espero ser uno de los miembros cheveres de la familia