domingo, 7 de marzo de 2010

Pucha, me mudo pues

Oh sí, ¡qué emoción! Mi mami está toda emocionada por la mudanza y me lo ha contagiado. Hoy fuimos a grab a bite al Jockey y, por coincidencias de la vida, fue lo último que hicimos.

Primero fuimos a mirar tiendas porque, o-bvio, necesitamos zapatos nuevos. No, en serio necesito zapatos nuevos, ¿no me quieren regalar unas bonitas DCs, Roxys o Etnies? Pero al final son muy caros o mi mamá dicen que son de poliomelítico y pues me quedé sin tabas una vez más. Después nos fuimos a ver ropa, eso es infaltable cada vez que vamos al Jockey. Ropa, ropa, ropa. Por lo general no compramos nada pero miramos todo... y lo criticamos. No compramos nada (once more) y subimos al tercer piso.

El piso de electrodomésticos, muebles y todas esas cosas es el paraíso de mi mamá. Creo que podría incluso gustarle más que los zapatos raros. En fin, habían cosas swirly y cajas moradas que me gustaron mucho. Eran como para hacerle click a "Like" debajo suyo (Facebook está incrustado en mi mente). Mi mami dijo que me compraría un espejo entero para ponerlo en mi baño y para que pueda ver lo linda que soy, CHIS-TE. Luego mi mamá se puso a mirar las cocinas, está determinada a comprar una que tenga una hornilla central de tres anillos para poder cocinar con el wok que comprará. A veces creo que mi mamá se proyecta mucho, pero estoy segura que tendrá su cocina y eventualmente también su wok.

Al final terminamos en el Food Court y me compré mi buen combo clásico de Bembos. Lamentablemente me dijeron: "¿Quieres papas y gaseosa grandes?" y yo, pensando en cualquier otra cosa, respondí que sí. Ahora tengo un vaso gigantesco de Coca Cola que aún no termino y que, estoy segura, no me dejará dormir hoy hasta altas horas de la noche.

Bien, ¿cuál era el punto de esto? Ah, cierto, está en el título. ¡Me voy a mudar! El edificio aún no está terminado pero yo ya me estoy emocionando. Especialmente porque hoy hubo una JARANASA en el departamento debajo del mío donde cantaron música criolla hasta el punto de hacerme desear no ser peruana. No es que no me guste la música criolla pero ya era demasiado, pregúntenle a Marina. ¿Qué tan alta pueden poner la música en un departamento de 140 metros cuadrados?

Éste edificio queda cerca de Benavides y de acá puedo tomar micros hacia cualquier parte de Lima y además tengo parques por todos lados y tiendas. El nuevo edificio no quedará cerca de una avenida tan versátil como Benavides, pero quedará a dos cuadras del centro comercial Caminos del Inca, how cool is that? Ché-ve-re. Pues parece que todo esto de embarcarnos en esta aventura de mudarnos va a ser divertido, tendré baño en mi cuarto y voy a pintar mis paredes con swirly stencils. Adivinen de que color. Sí, MORADO.

3 comentarios:

Unknown dijo...

XD
no sé que pasó primero cuando lei "adivinen de que color."
si el pensar "morado" o el leer "morado"
tal vez fueron al mismo tiempo.
los ingenieros te extrañarán...

Lele dijo...

Es que morado tenia que ser!
Si, y ya no te podre acosar D:
Igual buscare una manera de regresar a seguir acosandote

Fräulein N. Phos Mousou dijo...

Qué puedo decir pues. La envidia me CORROE.